Por suerte cada vez estamos más concienciados acerca de la importancia de la sostenibilidad y la reducción del consumo de energía en nuestros hogares. Una de las mejores formas de hacerlo es mediante el uso de sistemas de energía renovable para producir la energía que se requiere en nuestra vivienda.

Gracias a la cantidad de horas de sol que hay en nuestro país (con más de 8 horas al día somos, junto a Portugal, los que más de toda Europa) la mejor opción para energía renovable en nuestra vivienda es la energía solar.

¿Qués es la energía solar?

Es aquella energía de origen renovable que se obtiene de la radiación electromagnética del Sol. Dicha energía se puede convertir en energía térmica o eléctrica mediante captadores solares o módulos fotovoltaicos, respectivamente. Gracias a este tipo de energía podemos reducir nuestras facturas de energía y, en caso de alcanzar el autoconsumo, reducirla para siempre.

El sol es la principal fuente de energía de nuestro planeta, emitiendo en un día la energía suficiente para abastecer la demanda energética global de un año.

Solo un 50% de radiación que emite el sol se absorbe por la superficie terrestre y el océano mientras el resto, es reflejada por la atmósfera, las nubes, el suelo y el mar. A dicha energía se la denomina irradiancia, se mide en W/m2 y se puede usar para producir energía.

Tipos de radiación solar

  • Directa: Es la que llega de manera directa desde el sol, atravesando la atmósfera y sin que se refleje sobre ninguna superficie. Se puede concentrar para su uso.
  • Difusa: Es la que se recibe mediante los fenómenos de reflexión solar y refracción solar de la atmósfera y las nubes.
  • Albedo: es la radiación directa y difusa que se recibe por reflexión en el suelo y otras superficies próximas

Tipos de energía solar

Si bien hay muchas formas de usar este tipo de energía, actualmente destacarían tres.

1. Energía solar fotovoltaica

Usada para la producción de electricidad, permite transformar la radiación solar en energía mediante células fotovoltaicas (un conjunto de células constituyen un módulo fotovoltaico). Puede ser usada tanto en grandes instalaciones o en instalaciones domésticas para autoconsumo.

2. Energía solar térmica

Es la que se usa para calentar agua que se puede usar para climatización o agua caliente sanitaria.

Aplicación de la energía solar en viviendas unifamiliares

3. Energía solar pasiva

Es la que se aprovecha gracias al diseño de la vivienda de manera que permita maximizar la retención de calor.

En cuanto a estos tres tipos, la que se ha colocado en cabeza es la energía solar fotovoltaica, puesto que es la que, a nivel doméstico, nos permite obtener electricidad y alcanzar el autoconsumo eléctrico. Además, gracias a su crecimiento, los paneles solares han reducido su precio en un 85%.

Componentes de una instalación solar fotovoltaica

Los componentes de una instalación solar fotovoltaica son los siguientes:

  • Módulos fotovoltaicos: encargados de transformar la radiación solar en electricidad.
  • Regulador: encargado de impedir que la batería continúe recibiendo energía del colector solar una vez que ha alcanzado su carga máxima
  • Inversor solar: encargados de adaptar las características de la corriente generada a la demanda total o parcial para las aplicaciones, es decir, habilitan el uso doméstico.
  • Acumulador o Batería solar: encargadas de almacenar la energía eléctrica generada durante las horas de radiación para su uso posterior en los momentos de baja o nula insolación.
  • Cableado y contadores: son los encargados de transportar y cuantificar la energía que se obtiene.

Ventajas y desventajas de la energía solar

1. Ventajas

  • La energía solar es totalmente gratuita, por lo que se obtiene un gran ahorro económico
  • Ya existen muchas ayudas para la instalación de módulos fotovoltaicos en la vivienda
  • Es una energía renovable e inagotable
  • Puede ser aprovechada en cualquier parte del mundo
  • Su mantenimiento es muy sencillo y tienen una gran vida útil (puede alcanzar los treinta años).
  • Si tenemos una instalación de autoconsumo se pueden llegar a vender los excedentes obteniendo beneficios económicos.
  • Los módulos fotovoltaicos se sitúan en espacios libres
  • Costes a gran escala son muy reducidos.
  • No hay contaminación acústica
  • Las módulos fotovoltaicos se fabrican con Silicio, que es el segundo material más abundante en la tierra después del oxígeno.
  • Existen gran cantidad de ayudas para este tipo de instalaciones. Entre ellas, se pueden destacar los bonos verdes. Los bonos verdes se usan para la financiación de proyectos de eficiencia medioambiental, gestión de residuos, energías renovables y adaptación al cambio climático

2. Desventajas

  • Su instalación es bastante cara, aunque puede llegar a amortizarse de manera “rápida” en unos ocho años. Una instalación fotovoltaica para vivienda unifamiliar puede costar entre 6000 y 8000 €.
  • Depende de la localización. Si bien es cierto que sol hay en todo el mundo, se requiere de bastantes horas para que salga rentable su instalación.
  • No es una energía constante
  • Si bien existen baterías que permiten almacenar la energía, lo cierto es que aún no están muy desarrolladas.
  • Si no disponemos de espacio suficiente no podremos instalarlas
  • El rendimiento de los módulos fotovoltaicos no supera el 25%