Evitar los contagios de Covid-19 en espacios cerrados pasa por una buena ventilación y comprobar los niveles de C02 para medir la calidad del aire en centros educativos, edificios o transporte público.
Hace tiempo que somos conscientes de la importancia de la ventilación para reducir el riesgo de contagios de Covid-19. El propósito de la ventilación de los espacios cerrados es mantener una buena calidad del aire, para que sea seguro de respirar. El hacinamiento y la falta de aire fresco favorecen la transmisión del virus.
Pero el hecho de mantener las ventanas abiertas ha suscitado varias preguntas en la sociedad. ¿Qué pasa en invierno cuando hace frío? ¿La ventilación tiene que ser permanente o basta con que se realice varias veces al día? ¿Qué ocurre en las estancias en las que no es posible abrirlas y toda la responsabilidad recae en sistemas de ventilación mecánicos? La clave está en medir la calidad del aire para saber si es adecuada, independientemente del método que se utilice.
¿Cómo puedo saber si una estancia está bien ventilada?
Una forma sencilla de medir el grado de ventilación en aulas, edificios o estancias en general es utilizar medidores de la concentración de CO2: Si la concentración de este gas supera las 1.000 partes por millón (ppm) debemos incrementar la renovación del aire. Por ejemplo: abriendo las ventanas y puertas hasta comprobar que disminuyen los valores.
Las mediciones de CO2 pueden ser útiles para establecer pautas correctas de ventilación, ya sea mediante ventilación natural, mecánica o híbrida. También como sistemas de vigilancia de la calidad del aire en espacios como restaurantes, salas de reuniones o comercios. Así se consigue evaluar la eficacia de la estrategia de ventilación llevada a cabo en una estancia.
En ETRES Consultores podemos asesorarte o hacer una auditoría de las condiciones de confort de centros educativos, edificios, oficinas o transporte público. Para ello contamos con diferentes herramientas como por ejemplo, la medición de CO2, para analizar la calidad del aire en cualquier espacio cerrado. Gracias a este sistema podemos comprobar si la ventilación es la adecuada.

Para lograr una ventilación adecuada se deben seguir estos pasos:
- Identificar el tipo de ventilación disponible en cada estancia del establecimiento: natural, mecánica o combinación de ambas.
- Valorar si con el uso previsto (teniendo en cuenta los aforos máximos permitidos) es suficiente para no superar una concentración de 1000 ppm de CO2: para ello será necesario realizar mediciones y/o cálculos.
- Si los resultados obtenidos son insuficientes, hacer ajustes:
- Modificar o complementar la ventilación.
- Modificar el uso de las instalaciones (horarios, aforos).
- Comprobar si los ajustes garantizan las renovaciones de aire recomendados.
- Una vez logrado, elaborar unas instrucciones sencillas de ventilación forzada y/o natural para el personal que trabaja en el establecimiento y asegurarse de que las conocen y las tienen disponibles para consulta.
- Cumplir con los protocolos de ventilación, realizar el mantenimiento adecuado de los sistemas de climatización-ventilación y documentar las actuaciones realizadas.
En este sentido, en ETRES Consultores también ofrecemos un servicio de autoría energética para edificios o instalaciones para reducir significativamente las facturas o costes económicos por la energía consumida. Si quieres que te asesoremos sobre este servicio puedes agendar una videoconferencia con nosotros o llamarnos al 965 45 51 29.