Cada vez son más las personas que tienen claro que hay que combatir el cambio climático y garantizar un futuro mejor. Por ello se hace imprescindible apostar por la sostenibilidad y la eficiencia energética en las viviendas y negocios. Este compromiso pasa por adoptar medidas que contribuyan a aprovechar los recursos naturales y generar una alternativa a los materiales tradicionales de construcción.
Una buena forma de contribuir a este fin, pasa por construir edificios sostenibles, que no solo son beneficiosos para el Medio Ambiente. También pueden ahorrar en las facturas de electricidad, agua y combustibles. Los llamados edificios verdes evitan las sustancias tóxicas en la fabricación de materiales de construcción y reducen el consumo de energía. Algunos de ellos están construidos íntegramente con materiales reciclados. En Elche tenemos un ejemplo al contar con el edificio verde de mayor calificación sostenible de la provincia.
Vivir en un edificio con certificado ambiental verde tiene múltiples ventajas, pero quizá la más significativa sea la del ahorro a medio plazo en las facturas de electricidad y agua. Y además, disfrutaremos de un mayor confort, debido a la mejora de la calidad del aire y el agua, la disminución de ruido o la regulación de la luz.
Por si esto no fuera suficiente, se consigue proteger nuestro entorno, reduciendo al mínimo el impacto ambiental, y proporcionando mayor comunicación y accesibilidad en nuestro entorno.
En definitiva, apostar por la edificación sostenible no solo se traduce en rentabilidad económica, sino también en una mejor calidad de vida. Y esto es algo que debemos tener muy en cuenta para conseguir un Mundo mejor y más respetuoso con el Medio Ambiente.
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